ni si quiera alejarme
solo hacía una cosa
soñar que era tu amante.
Cuanto te vi,
mis ojos re recorrieron,
mi mente te deseo entero, y
te susurré un "te quiero".
Tus ojos, tus brazos, tus besos
los añoré, los eché de menos
aunque, por ti cambié mi nombre, y
borré mis recuerdos.
Todas las noches
pienso que eres mio,
que vivimos un cuento
en el que yo soy una
princesa de cuento y tú
un valiente guerrero.
Bueno, qué, ¿ya no actualizas? ¬¬
ResponderEliminar